Servicio de Salud, Fiscalía y Contraloría investigan a reputados oncólogos de La Araucanía por «experimentar» con tratamientos
Oncólogos siguen trabajando en ambas recintos. PDI ya incautó documentación de pacientes actualmente atendidos por ambos profesionales
Grave. Información aportada por medios nacionales afirman que el Servicio de Salud Araucanía Sur está investigando de manera reservada, la situación de dos conocidos oncólogos -padre e hijo- identificados como E.Y y P.Y quienes son indagados por derivar pacientes con cáncer del Hospital Regional de Temuco a su clínica particular a fin de aplicar métodos farmacológicos no diagnosticados en los tratamientos establecidos para estos usuarios.
Según una investigación del canal MEGA Investiga, una de las personas que fue derivada desde el Hospital Regional hasta la Clínica James Lind, recinto privado de propiedad de ambos profesionales, pudo haber fallecido producto de los tratamientos realizados por los oncólogos, sin haber explicado a sus pacientes que los medicamentos aplicados eran parte de un ensayo clínico.
El Servicio de Salud Araucanía Sur, llevaría casi seis meses de investigación por cuanto ambos profesionales habrían realizado selecciones de pacientes, a partir de sus fichas clínicas, y los habrían derivado sin el consentimiento del recinto hospitalario y sin entregar toda la información a los pacientes. De esta situación, el Servicio habría estado al tanto desde el año 2021, sin embargo, desde el año 2023 se dispuso la prohibición a este tipo de acciones, situación que no obstante, – lo cual es motivo de indagación- los oncólogos cuestionados no habrían acatado.
Según se precisa desde la Contraloría General, por esta situación también se estarían indagando implicancias administrativas por cuanto ambos profesionales son funcionarios contratados por el Estado, y por tanto, su actuar al trasladar pacientes desde un servicio público a un privado sin seguir los procedimientos establecidos, serían constitutivos incluso de situaciones de detrimento al Fisco.
Desde el Ministerio Público, el fiscal Luis Arroyo, explica en el informe periodístico que hasta ahora se han aplicado acciones tendientes a incautar una serie de documentos con información sensible de las personas que se atienden en el centro James Lind, el cual sigue funcionando, al igual que los profesionales quienes siguen ejerciendo sus actividades tanto en el Hospital Regional como en la clínica privada.
La situación más grave -mencionada en el reportaje- que podría involucrar a ambos profesionales con un delito sería la muerte de una paciente identificada con las iniciales M.G, quien a pesar de tener su cáncer controlado mientras permanecía en el Hospital Regional, al ser trasladada por uno de los oncólogos tratantes a la clínica, y luego de aplicarse un nuevo tratamiento con fármacos, la mujer comenzó a empeorar en su estado hasta llegar a complicaciones que terminaron con su vida.
Según da cuenta el reportaje, los oncólogos defienden su postura como así la acción de traslado de los pacientes, en el concepto de «bien mayor del paciente», situación que no obstante está siendo puesto en duda por los organismos fiscalizadores.
